Un amplio sector del partido comparte que la imagen del secretario general del PP y del portavoz parlamentario en el Congreso está "estrechamente ligada" a los atentados terroristas del 11-M, ya que ambos jugaron un papel determinante en los días posteriores a la masacre como ministro del Interior y portavoz del Gobierno, respectivamente.

Los dirigentes populares consultados por Servimedia no critican la labor que Acebes y Zaplana han desarrollado durante este primer año de oposición, sino que advierten de que el PP difícilmente podrá presentarse como un opción de futuro mientras Rajoy siga rodeado de personas que los ciudadanos identifican con una etapa del pasado como el 11-M.

Rajoy debería, en opinión de estas fuentes, dar mayor presencia a "caras nuevas" en la dirección nacional del PP e incluso impulsar un proceso de renovación que combine la experiencia de quienes fueron ministros en los gobiernos de José María Aznar con la frescura de nuevos y jóvenes valores populares.

Estos cambios llegarían "en buen momento" una vez que el Congreso de los Diputados ha puesto fin a la comisión de investigación sobre el atentado del 11-M.

Las fuentes consultadas por Servimedia aducen que el PP debe pasar definitivamente esa página de la historia y comenzar una nueva etapa de oposición, con gente nueva y con tiempo suficiente para consolidar un equipo antes de las elecciones generales previstas para 2008.

La renovación debería afectar no sólo a la dirección nacional del PP, sino también al Grupo Parlamentario del Congreso, según muchos de sus integrantes.

En los últimos meses, los diputados han transmitido personalmente a Zaplana la necesidad de mejorar la labor de los portavoces adjuntos y potenciar la presencia pública de los expertos en cada materia.

FALTA DE OPORTUNIDAD DE PIQUE

Más allá del fondo de la cuestión, las declaraciones de Josep Piqué en las que reclama que la imagen pública del PP esté representada por más gente, además de Acebes y Zaplana, no han sentado nada bien en otro sector del partido.

Algunos cargos populares aseguran que las palabras de Piqué llegan "en mal momento" y temen que desemboquen en una cascada de reacciones e informaciones durante todo el verano que cuestionen la unidad interna del Partido Popular y pongan en duda el liderazgo de Mariano Rajoy.

Estas fuentes, presentes en el PP desde sus orígenes, piden máxima unidad y recuerdan que la disparidad de criterios y el enfrentamiento público entre sus dirigentes fue lo que mantuvo durante años en la oposición a la antigua Alianza Popular de Manuel Fraga.

Tampoco vean con buenos ojos las manifestaciones de Josep Piqué en el sector duro del Partido Popular, que habitualmente se siente identificado con el criterio de Angel Acebes, ya que interpreta que la crítica del líder del PP de Cataluña va dirigida en realidad a todo lo que representa el secretario general de los populares.