El paro afecta tanto a la minería privada, centrada en Cangas de arcea, Tineo, Tormaleo, Camocha y Minas de Figaredo, como a la pública (Hunosa), en la cuenca central de Asturias, y tan sólo se realizan tareas de mantenimiento en los pozos.

Esta es la primera huelga general en el sector minero transcurridos dos años y medio de las últimas movilizaciones que se produjeron cuando se negociaba el segundo plan de futuro de Hunosa.

Ahora, la huelga es en apoyo a los trabajadores de Carbonar, empresa privada situada en la cuenca antracitera de Cangas de Narcea, en e suroeste de Asturias, cuya plantilla se encuentra sometida a una regulación de empleo temporal al haber agotado los cupos de producción de carbón asignados por la Administración central para este año.

Los sindicatos convocantes, CCOO y SOMA-FIA-UGT, a los que se ha sumado USO, piden un aumento de los cupos de carbón para evitar el cierre de la empresa y el despido de los 273 trabajadores, de los que 241 sufren dicha regulación temporal de empleo.

Fuentes del SOMA-FIA-UGT han asegurado que "el pao es una clara advertencia a los empresarios para que dejen de utilizar actitudes de chantaje hacia los trabajadores y una exigencia para que den una solución definitiva al problema del suministros de carbón, tanto en la antracita como en el resto de la minería asturiana".

El sindicato minero considera que Carbonar se está aprovechando de las ventajas que proporciona un mercado intervenido "con garantía de suministro de la producción y ayudas públicas, y a la vez reivindicar el libre mercado para procder al despido indiscriminado de los trabajadores".

Por su parte, los ocho sindicalistas que permanecen encerrados en el Grupo Centro de Carbonar se encuentran "con buen ánimo", según un portavoz, aunque la humedad que existe en la galería ya está haciendo mella en algunos de ellos, que están recibiendo tratamiento médico tras serles detectados síntomas de neumonía.

Mientras, siete de las ocho mujeres de estos mineros permanecen encerradas desde hace 9 días en el salón de plenos del Ayuntamiento e Cangas y anuncian que no depondrán su actitud hasta que se solucione el conflicto.