Según informaron hoy ambas entidades, el Ministerio de Industria, Turismo y Comercio se había comprometido a convocar esta mesa de trabajo después de conocer la valoración de la Comisión Nacional de Energía (CNE) sobre su propuesta de real decreto.

Sin embargo, "un mes y medio después de que el organismo regulador la valorase negativamente, el sector fotovoltaico sigue esperando, cada vez más afectado por la incertidumbre y la inestabilidad regulatoria", indican.

Agregaron que, ante el parón en el diseño de esta regulación, la inversión se ha paralizado y las empresas "no pueden planificar su actividad más allá de seis meses".

La elaboración y tramitación de un nuevo real decreto necesita varios meses, lo que recorta aún más el escaso "tiempo útil" del que dispone el sector para conocer las condiciones bajo las que tendrá que operar, afirman ASIF y APPA.

A ese plazo temporal hay que añadir la incertidumbre y el retraso que aporta la convocatoria de elecciones generales el próximo 9 de marzo, por la presión que ejerce la campaña electoral sobre la agenda pública. De ahí que el sector reclame al Gobierno que las consersaciones se reanuden de forma urgente.