Salud

Satse pide la intermediación del Defensor del Pueblo para lograr la jubilación anticipada de las enfermeras

MADRID
SERVIMEDIA

El Sindicato de Enfermería Satse ha pedido la intermediación del Defensor del Pueblo, Ángel Gabilondo, para que el Gobierno “promueva” el cambio legislativo que permita la jubilación anticipada voluntaria para las enfermeras debido a sus “peligrosas, duras y penosas condiciones de trabajo a lo largo de más de cuarenta años”.

Así lo anunció este sábado el sindicato en un comunicado, en el que precisó que su presidente, Manuel Cascos, se ha dirigido por carta al Defensor en el marco de las actuaciones que viene realizando la organización sindical desde hace tres años para lograr que el Ministerio de Seguridad Social impulse el cambio normativo que haga posible la aplicación de un coeficiente reductor de la edad de jubilación en favor de las enfermeras que prestan sus servicios en el ámbito sanitario o sociosanitario.

En su misiva, el sindicato advierte al Defensor del Pueblo que la “calidad y seguridad” de la atención y cuidados que ofrece el sistema sanitario “se está viendo seriamente afectada” por las condiciones “especialmente duras y penosas” que, a su juicio, “sufren” las enfermeras en los hospitales, centros de salud y otros centros sanitarios y sociosanitarios.

En este sentido, el presidente de Satse explicó al Defensor que las enfermeras “sufren una continua sobrecarga asistencial y unos niveles muy altos de responsabilidad y estrés” que, junto con la exposición a una serie de “riesgos” biológicos, químicos, físicos o psicosociales, conllevan la aparición de “determinadas patologías y problemas de salud” que, a su entender, “empeoran con el paso de los años”.

“Una lamentable realidad que tiene consecuencias claras y directas en la atención al paciente, ya que las enfermeras, por la naturaleza de su trabajo y la complejidad de este, necesitan una pericia y habilidades específicas, así como un estado de permanente alerta y vigilancia, que se ven afectadas a causa de la evolución cronológica natural de las personas”, sentenció.

DETERIORO EMOCIONAL IMPORTANTE

Para el sindicato, “es fácilmente entendible” el hecho de que una enfermera que, “por ejemplo, lleva ya más de 40 años de trayectoria profesional en un centro sanitario y ha tenido que “enfrentarse diariamente a todo tipo de situaciones y riesgos, no tenga la misma destreza y habilidad por mucho que su dedicación y compromiso sea el mismo que cuando inició su labor asistencial y de cuidados”.

Junto a ello, subrayó que las enfermeras mantienen a lo largo de su vida laboral “un contacto permanente con la enfermedad, el dolor, el sufrimiento humano y, en ocasiones, la muerte”, lo que, según su criterio, “supone un deterioro emocional muy importante”.

En paralelo, recordó que “un alto porcentaje” del colectivo desarrolla su labor realizando turnos rotatorios, que incluyen el trabajo nocturno durante “gran parte de su vida laboral”, lo que, según su punto de vista, “afecta a su salud y a su envejecimiento prematuro”.

A este respecto, el sindicato hizo hincapié en que, desde hace más de tres años, ha demandado al Gobierno que “acabe” con lo que considera “una clara deuda pendiente” con la profesión enfermera y “posibilite algo que la Ley General de la Seguridad Social ya contempla”, como es que se rebaje la edad mínima exigida para tener derecho a la jubilación a aquellos grupos o actividades profesionales cuyos trabajos sean “de naturaleza excepcionalmente penosa, tóxica, peligrosa o insalubre y acusen elevados índices de morbilidad y mortalidad”.

“Algo que se ha hecho con otros colectivos profesionales”, advirtió, al tiempo que subrayó que el sistema de jubilación por coeficientes reductores que propone “no implica una sobrecarga adicional del sistema público de pensiones ni tampoco de la Seguridad Social”, ya que prevé una cotización incrementada que se abonará “durante toda la trayectoria profesional de cada enfermera”.

(SERVIMEDIA)
17 Jun 2023
MJR/nbc