Las primeras, afirma Satse en un comunicado, "sufren diferencias considerables tanto por el inexistente desarrollo de su carrera profesional como por sus inferiores retribuciones, lo que provoca que muchas de ellas renuncien a sus puestos de trabajo en residencias, centros de atención a dependientes, etc. para prestar servicios en los centros dependientes del Sermas".

"El hecho de que todo el personal sanitario de la Comunidad de Madrid, tenga el mismo régimen jurídico, o al menos la posibilidad de acceder a él, no sólo eliminaría parte de la discriminación que sufren respecto a sus compañeros, sino que además facilitaría su movilidad en el conjunto de la Administración, y evitaría el éxodo masivo que hoy en día se da en los centros dependientes de las Consejerías de Familia y Asuntos Sociales y de Educación", concluye el comunicado.