Baqueiro señaló que si en 1992 sólo llegaban andando, a caballo o en bicicleta, únicas formas de obetener este certificado, sólo el 3 por ciento de los peregrinos, que acudían a la ciudad del apóstol, ese porcentaje se eleva ya este año al 14 por ciento y se preven incrementos sustanciales durante el próximo verano.

En total, y entre el míercoles y domingo e Pascua, unas 106.000 personas viajaron a la capital gallega, de las que 34.300 se desplazaron en autobus, 48.700 en turismos particulares, 10.400 en tren, por lo que Renfe triplicó su oferta en los trayectos con Madrid y Barcelona y 2.700 en avión.

La mayor afluencia de visitantes se contabilizó el viernes santo con 30.000 personas, seguido del sábado con 20.000. Así, según reconoció Baquerizo, las previsiones de las autoridades se están desbordando, sobre todo en lo referente a peregrinaciones a pi y en bicicleta.

La mayor parte de los visitantes llegaron procedentes del País Vasco, Navarra, comunidades del centro de España y principalmente de localidades de Galicia.