En la segunda reunión tripartita entre la Junta de Andalucía, dirección de la empresa y trabajadores, retrasada hasta hoy por la celebración del Congreso del PSOE andaluz este fin de semana, la multinacional apeló a las cifras de productividad de su planta en Canadá para justificar medidas como la reducción del 60% de la plantilla, que pasaría de 2.400 empleados a unos 900.

Según confirmó el presidente del comité de empresa, Antonio Fernández Siles la dirección ha presentado un estudio de productividad comparada que no supone ningún estudio de viabilidad, tal y como habían prometido.

"Es el mismo planteamiento adornado con alguna historia o matiz. Es la leche en vinagre", dijo Fernández Siles en uno de los recesos de la reunión, cuando ya había transcurrido dos horas de la misma. Según participantes en la negociación, Suzuki ha cambiado la denominación de su anunciado plan de viabilidad por la de plan de choque.

Al encuentro asisten 20 traajadores por parte del comité de empresa, el responsable de Suzuki España Yoshiro Maeda, acompañado por asesores jurídicos del gabinete de Garrigues Walker, y una delegación de la Junta de Andalucía integrada por el consejero de Trabajo, Francisco Oliva; el viceconsejero de este departamento, el director general de Trabajo y delegado en esta materia en Jaén.

Por su parte, el presidente de la Junta, Manuel Chaves, aseguró hoy que el Gobierno andaluz va a incentivar a todos los empresarios que quieran uicarse en la comarca de Linares y fomentar así la creación de empleo.

Asimismo, insistió en que Andalucía ha iniciado su recuperación económica y restó importancia a la crisis industrial andaluza por considerarla igual que la del resto de España y Europa.