El laudo, a cuyo contenido ha tenio acceso Servimedia, descarga la responsabilidad de la situación actual de la empresa en la actitud mantenida por la dirección y los sindicatos durante los años en los que era evidente el proceso de "deterioro industrial" del grupo armamentístico español.

Este es el motivo por el que los árbitros del conflicto han optado por dar un plazo de tres meses a empresa y sindicatos para buscar un plan de viabilidad pactado a Santa Bárbara, en el que aconsejan, junto al aumento de las compras de Defensa, la búqueda de nuevas actividades civiles de diversificación para reducir la dependencia de los contratos del Estado, y buscar socios que aporten capital al saneamiento financiero del grupo.

La resolución arbitral cifra en un 86 por cien el exceso de actividad que tiene actualmente Santa Bárbara, por lo que se ha ordenado una suspensión temporal de empleo a un porcentaje equivalente de la plantilla durante los tres meses en los que debe buscarse el acuerdo.

No obstante, los árbitros advierten que que sa cual sea el acuerdo, debe reconocer la existencia de excedentes de producción y por tanto laborales. De esta posición cabe deducirt que al final habrá cierres de centros y despidos, pero su intensidad dependerá del grado de acuerdo etre ambas partes.

Este criterio se refuerza con algunas de las cifras recogidas en el laudo, como la caída de la facturación del grupo entre 1987 y 1993, que pasó de 18.200 millones de pesetas a 2.532, al tiempo que se ha reducido la carga de trabajo en ese período más dl 88 por cien.