La secretaria adjunta del Grupo Socialista Mercedes Aroz, aseguró en rueda de prensa que esta iniciativa contribuiría al abaratamiento de los medicamentos y a un ahorro de la Seguridad Social, ya que los descuentos se incluirían en los convenios del Sistema Nacional de Salud y las farmacias.

El descuento se haría a partir del establecimiento de un precio máximo de venta al público para los medicamentos y el límite de la rebaa podría ser ampliado por el Gobierno mediante real decreto.

Actualmente, explicó Aroz, sólo tienen consideración de máximos los precios de laboratorio, pero no el precio final, que incluye el margen comercial de los almacenes y las farmacias, y los impuestos.

El margen de beneficio farmaceútico es aún "elevado" respecto a otros países de Europa, por lo que, en su opinión, hay margen suficiente para que los ciudadanos puedan comprar los medicamentos más baratos.

El porcentaje de rebaja del pecio, según la propuesta socialista, no sería homogéneo, sino que se fijaría teniendo en cuenta las diferencias entre unas farmacias y otras según su ubicación y el volumen de venta que tiene cada una.

Se trata, además, de un momento "oportuno" para presentar esta iniciativa, ya que aún no se conoce la lista de medicamentos excluidos de la financiación de la Seguridad Social y las cifras de ahorro manejadas por el Gobierno "no son nada claras".