La emisón del "pasaporte mortuorio", que llamado "laisser passer" (libre paso), crece durante los meses de verano, ya que "al ser España un país receptor turístico, aumenta el número de extranjeros y, por lo tanto, los fallecimientos".

José Quintana explicó que el "laisser passer" es un único docuento que facilita los trámites aduaneros y sanitarios que cada país impone, y que símplemente con mostrarlo a la autoridad aduanera el féretro puede pasar.

El "Laisser passer" lo concede una autoridad distinta dependiendo del país que forma parte del convenio internacional sobre traslado de cadáveres.

En España lo concede el Ministerio de Sanidad y Consumo, en Francia lo otorga el Ministerio de Interior y en Alemnia, el alcalde correspondiente.