Según informó el departamento ministerial, aunque históricamente se consideraba una enfermedad del pasado asociada a la minería, los casos aumentaron en las últimas décadas, afectando a nuevos sectores industriales, como la fabricación y la manipulación de aglomerados de cuarzo (o piedra artificial), utilizados en encimeras de cocina y baños.

Esta circunstancia propició que diferentes agencias sanitarias nacionales hayan reevaluado en la última década los riesgos de la sílice cristalina respirable, mostrando su impacto más allá de la propia silicosis, destacando en particular el cáncer de pulmón o patologías respiratorias y cardíacas.

El objetivo del informe ‘La reemergencia de la Silicosis en España’ es caracterizar esa reemergencia y medir la magnitud del problema, identificar los principales sectores productivos generadores de la enfermedad, así como la distribución geográfica de la silicosis en España.

Desde 2007 a 2024 se comunicaron en España 5.900 partes por silicosis, 520 en el año 2024. Además, desde 2018 se notificaron 46 partes de cáncer de pulmón por exposición a sílice, 19 de ellos en el año 2024. Casi la mitad de los partes por silicosis (47,8%) se registraron en la fabricación y manipulación de aglomerados de cuarzo y en el procesado de piedra natural (granito y pizarra, principalmente).

SECTORES IMPLICADOS

La construcción, la extracción de otros minerales no metálicos ni energéticos, y la metalurgia completan los principales sectores implicados en esta reemergencia.

La investigación del Ministerio de Sanidad también constató el aumento de los procesos asistenciales por silicosis como diagnóstico principal en trabajadores jóvenes. Estos procesos están sometidos a un elevado nivel de infrareconocimiento como enfermedad profesional, lo que implica la socialización de los costes asistenciales por el Sistema Nacional de Salud.

Con este estudio se comprobó que se registraron 4.418 partes de enfermedad profesional causada por exposición a la sílice cristalina entre 1990 y 2019. Además, el sector de la ‘Fabricación de otros productos minerales no metálicos’ acumula el 50% de los casos.

Por comunidades autónomas, Galicia contabiliza el mayor número de casos (32,9%), seguida de Castilla y León (14%) y Andalucía (10,3%). Del mismo modo, se observó un aumento de casos en trabajadores más jóvenes y una disminución en la edad mediana de los pacientes atendidos por silicosis.

PATOLOGÍAS ASOCIADAS

Los trabajadores expuestos a sílice cristalina pueden desarrollar otras enfermedades, como patologías respiratorias, cardíacas o cáncer de pulmón. Igualmente, el estudio desveló que los costes sanitarios directos de la asistencia a los casos de silicosis corren a cargo del propio Sistema Nacional de Salud que financió el 97,5% de los procesos asistenciales entre 1997 y 2020. Asimismo, se registraron 4.418 defunciones por silicosis entre 1990 y 2020.

Ante esta situación, el estudio del Ministerio de Sanidad recomendó continuar el estudio de la silicosis y otras enfermedades laborales asociadas a la exposición a la sílice cristalina, mediante un estudio cualitativo que permita conocer en mayor detalle la situación sanitaria y médico-legal de los afectados.

Además, reconocer el origen laboral de los procesos asistenciales por silicosis, para lograr una mayor contribución del sistema de Seguridad Social a la financiación de los costes asistenciales generados en el Sistema Nacional de Salud, así como extender el reconocimiento de enfermedad profesional causada por la sílice cristalina a enfermedades inmunomediadas sistémicas, tales como la esclerodermia sistémica, la artritis reumatoide, el lupus sistémico.

RECOMENDACIONESD

Junto a estas recomendaciones, profundizar en el estudio de las condiciones y sectores de exposición de las mujeres expuestas a la sílice cristalina, para una mejor comprensión de la extensión epidemiológica de los riesgos de la sílice cristalina, así como proporcionar en los registros del RAE-CMBD y BDCAP un identificador individual de paciente anonimizado, que permita estudiar los itinerarios asistenciales de los afectados.

Igualmente, extremar las medidas de vigilancia y seguimiento sobre los principales sectores productivos que están en el origen de la reemergencia de la silicosis en España para conocer con detalle la evolución del número de casos en los mismos.

También se pide considerar la prohibición de los aglomerados de cuarzo o la reglamentación mucho más estricta del trabajo con estos materiales, siguiendo el ejemplo de otros Estados y territorios como Australia o California.

El informe del Ministerio de Sanidad también subrayó la necesidad de una mayor atención y acción coordinada de la administración pública para abordar la reemergencia de la silicosis en España, con el fin de proteger la salud de los trabajadores y garantizar una adecuada atención sanitaria y reconocimiento de los derechos de los afectados.