Así lo indicó durante su intervención en un acto de partido celebrado en Granada junto al líder de los socialistas andaluces, Juan Espadas, al que mostró su apoyo y donde afirmó que “tienes a todo el partido detrás para lograr el cambio que Andalucía quiere y necesita”.

Durante su discurso, el presidente del Gobierno señaló que “es curioso” cómo la derecha “se niega a apoyar una buena reforma de país”, que “va de responder a los dos principales males, que es la precariedad laboral y potenciar los contratos de formación también”, que “ha sido acordada por los agentes sociales”.

Sánchez lamentó tener enfrente a una “oposición negacionista” que “no estuvieron en lo malo de la pandemia, ni lo están en lo bueno con la gestión de los fondos europeos”, por lo que criticó que “la derecha demuestra que el negacionismo político existe, que es el que practica el Partido Popular en España”.

El presidente del Gobierno quiso reivindicar “la buena política, la política de la verdad y el rigor frente a la del insulto y la crispación, como vemos muchos días”. Sánchez añadió que la buena política es “aprender de los errores y extraer lecciones para el futuro”. Por ello, aseguró que, “de la pandemia, podemos sacar que nunca más habrá recortes del Estado de bienestar”.

En este sentido, incidió en que “la lección de esta pandemia es que necesitamos crecer para repartir y para repartir hay que crecer. “Eso es socialdemocracia” y un proyecto político que ha centrado su trabajo sobre un verbo, “el verbo crecer”

“NO ME ARRASTRARÁN”

El presidente del Gobierno lamentó que “enfrente tenemos una oposición negacionista” que “no estuvo en lo malo de la pandemia, ni lo están en lo bueno, ni tampoco en la gestión de los fondos europeos”. Por ello, incidió en que “la derecha demuestra que el negacionismo político existe, que es el que practica el Partido Popular en España”.

Sánchez reivindicó que no ha habido “ni un minuto” en el que no hayan trabajo “por la dignidad” de los españoles, “haciendo de la política un elemento útil alejado de la corrupción, la crispación y el enfrentamiento que llevó a cabo la derecha”.

El presidente del Gobierno comentó que “hay que tener paciencia con la derecha” porque “llevan fatal eso de estar en la oposición y lo de perder unas elecciones”. En este sentido, remarcó “no me voy a dejar arrastrar al insulto, a la crispación a la que nos quiere llevar la derecha española”.

Por último, afirmó que la derecha y la ultraderecha “demuestra su resignación, su tristeza y la quiebra de su proyecto político” frente a la “superación, crecimiento y transformación y, por tanto, futuro de nuestro país del proyecto del PSOE”.