Así lo dijo Sánchez durante su participación en un acto de los socialistas catalanes en L´Hospitalet (Barcelona), en el que agradeció el apoyo que está recibiendo él y su familia ante una oposición con la que hay que tener "mucha paciencia".

En este contexto, Sánchez respondió al presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo cuando le llamó "lacrimógeno". "A mí no me duelen prendas en decir que quiero a mi mujer, que voy a defender su honorabilidad ante los ataques infames de aquellos que solamente hacen oposición destructiva contra el adversario político", afirmó.

El líder del PSOE recuperó su discurso de llamar a las mujeres, jóvenes, y mayores y llamó a las mujeres a "liderar la resistencia a la ultraderecha": "No os podéis quedar en casa".

Por otra parte, Sánchez presumió de que "la economía va como un cohete, ya no lo digo yo, es que lo dice el Fondo Monetario Internacional y más en un contexto tan complejo como estamos viendo", tras los últimos datos de este organismo internacional.

"MUÑECAS RUSAS"

En un acto central del PSC en esta campaña, en el que no intervino ninguno de los miembros de la candidatura al Parlamento Europeo, Sánchez aludió a los buenos resultados que en las filas socialistas creen que van a tener este 9-J, aunque esta vez no aseguró en público su victoria en votos y escaños.

Sostuvo que el PP comenzó la campaña asegurando que iban a “a arrasar las elecciones” y “a ganar de más de 10 puntos al PSOE”, cuando “ahora” el “lema del PP es este partido lo vamos a empatar”.

Con sornas, el líder socialista indicó que les “echan la culpa” de “hipotético mal resultado a los socialistas” de manera que, “aunque sea por una vez, le vamos a dar la razón porque vamos a ser los zurdos y las zurdas, el próximo 9 de junio, los que votemos al PSOE para frenar a la derecha y a la ultraderecha, de Feijóo y Abascal”.

Poco después, el presidente comparó a estos dirigentes con Pérez tirando de las “muñecas rusas que se van abriendo y contienen otra dentro”. Defendió que los pactos de Feijóo con la ultraderecha han acabado “por devorarle”, hasta el punto de que del PP de Feijóo sale el Vox de Abascal, y que de Vox sale ahora Alvise. “Los tres son la matryoshka de la internacional ultraderechista”, alertó.

Así lo dijo Sánchez durante su participación en un acto de los socialistas catalanes, en el que agradeció el apoyo que está recibiendo él y su familia ante una oposición con la que hay que tener "mucha paciencia".

"ATAQUES INFAMES"

En este contexto, Sánchez aludió a que Feijóo le haya llamado "lacrimógeno". "A mí no me duelen prendas en decir que quiero a mi mujer, que voy a defender su honorabilidad ante los ataques infames de aquellos que solamente hacen oposición destructiva contra el adversario político", afirmó.

Dentro de la movilización masiva que quieren que se dé en las urnas, el líder del PSOE recuperó su discurso de convocar a las mujeres, jóvenes y mayores a las urnas y llamó a las mujeres a "liderar la resistencia a la ultraderecha": "No os podéis quedar en casa".

Cuando empezó a decir la idea que comparte en todos los actos de reprochar a la derecha que diga que España se rompe y se hunde, y reivindicó que “ha ganado Salvador Illa las elecciones, y por primera vez en 40 años el independentismo no tiene una mayoría absoluta”, Sánchez aprovechó para cargar contra la idea de una posible moción de censura contra su Presidencia.

“El que no es presidente porque no quiere -en referencia a Feijóo-pero parece que se ha arrepentido porque le dice a Puigdemont: oye que yo quiero hacer una moción de censura”, afirmó Sánchez para regocijo de los presentes en el polideportivo de L`Hospitalet.

El presidente desmontó el “España se hunde" que asegura que defienden Feijóo y Abascal y “que como meteorólogos no tienen ningún futuro", porque, presumió, que "la economía va como un cohete ya no lo digo yo, es que lo dice el Fondo Monetario Internacional y más en un contexto tan complejo como estamos viendo", tras los últimos datos de este organismo internacional.