“Evidentemente, tanto los ministros, o en este caso la presidenta del Congreso, claro que cuentan con mi respaldo”, aseveró Sánchez desde Brasilia en la rueda de prensa que ofreció junto al presidente de la República Federativa de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, dentro de la visita oficial a este país sudamericano.

Sánchez indicó que, "defender la democracia" y "luchar contra estos casos de falta de ejemplaridad o de corrupción, también es no infundir bulos, descalificaciones, insidias, que lo que hacen es poner en marcha una estrategia de ventilador” que genera "mucha zozobra" en la opinión pública.

En esta línea, el presidente destacó que su Gobierno “lo que ha hecho ha sido reaccionar de manera inmediata, contundente y ejemplar” porque “los momentos en los que hubo una corrupción institucionalizada, protegida e incluso estructurada” ya “pasaron, son algo del pasado, del año 2018".

Por tanto, el jefe del Ejecutivo subrayó que el suyo es un “un Gobierno incompatible con cualquier caso de corrupción que exista" e "implacable" contra "esa corrupción” y que también es “consecuente y coherente” porque “si se exigen esos estándares de ejemplaridad” debe “aplicarse a su mismo partido”. “Y eso es algo que yo no veo desgraciadamente en la oposición”, lanzó Sánchez contra el Partido Popular, después de que se le recordara que el PSOE expulsó al exministro José Luis Ábalos tras el estallido de este caso.