Para Jové, una política de privtizaciones supondría revelar una "incapacidad para poner al descubierto el dinero negro de este país, para mejorar los ingresos del Estado con una reactivación económica". Abogó, en cambio, por una "potenciación la empresa pública y por el perfeccionamiento progresista de nuestro sistema fiscal".

"El señor Montoro, además de pedir 'cuentas claras", añadió Jové, "debería hacer un análisis de los ingresos presentes y futuros antes de plantear alegremente una venta de las empresas o participaciones públias rentables, de las que proceden una parte cuantiosa de esos ingresos".

El dirigente de Izquierda Unida consideró que "la venta de las empresas deficitarias no constituye la panacea de las soluciones económicas, ya que puede ocurrir que su compra por 'tiburones financieros' no resuelvan industrialmente nada, como ocurrió con Intelhorce, y sea peor el remedio que la enfermedad".

Jové también criticó la actitud del Gobierno socialista en funciones por estar llevando a cabo una venta "apresurada" d participaciones en Argentaria.

Por último, Jové pidió para este comienzo de legislatura "transparencia en la política económica", que el nuevo gobierno presente las medidas que va a tomar y que en esta presentación incluyan los costes de oportunidad y una proyección de los resultados estimados, "a fin de llevar a cabo constrastaciones más ajustadas con la realidad por parte de todos".