Sagardoy aseguró a Servimedia que la idea de la patronal es "muy oportuna", ya que supone un equilibrio entre la "temporalidad rabiosa y la indefinición eterna" de los contratos.

El catedrático de Derecho del Trabajo recordó que hace casi 10 años publicó un artículo en el que defendía la creación de un contrato muy parecido, aunque de causalidad genérica -en vez de por obra o servicio- y de mayor duración que el propuesto por la CEOE (5 años).

Además, Sagardoy propone que este tipo de contrato, que él mismo denomina como "contrato indefinido a término", fije una indemnización a su conclusión o en el caso de que se rompa de forma extraordinaria.

El catedrático de la Complutense admitió que esta modalidad contractual puede tener una imagen de "contrato antisocial", pero aseguró que "merece la pena" profundizar en la idea, ya que ofrece "una relativa estabilidad en el empleo, con su debida indemnización y con un horizonte de trabajo mucho más razonable".

Asimismo, Sagardoy apuntó a que esta modalidad podría mejorar los dos problemas principales del mercado laboral señalados por el grupo de expertos designado por el Gobierno para la reforma del mercado de trabajo: la excesiva temporalidad y la falta de flexibilidad de las empresas.

"Este tipo de contrato conjuga cierta estabilidad y flexibilidad, es lo que se llama la 'flexiseguridad', y sería un buen modo de ser realistas", aseguró el catedrático.

En cuanto a la propuesta anunciada por el Gobierno de generalizar los contratos de fomento de la contratación indefinida para abaratar el despido, Sagardoy apostó por una solución intermedia.

El contrato indefinido ordinario fija una indemnización por despido de 45 días por año trabajado, mientras que el Gobierno propone generalizar el modelo que fija 33 días por año. No obstante, la propuesta del experto laboral es fijar unos límites entre 30 y 45 días por año, y que sea un juez el que decida la cifra según cada caso.

"De esta forma se acabaría con la automatización del despido", aseguró el catedrático de Derecho del Trabajo y Seguridad Social.

Por otro lado, Sagardoy se mostró "totalmente partidario" de "resucitar" los contratos de lanzamiento de nueva actividad, modelo que despareció hace años.

El catedrático admitió que "siempre le pareció mal" la desaparición de esta modalidad, que fija condiciones especiales durante los tres primeros años desde el nacimiento de una empresa o desde el lanzamiento de un nuevo producto.

Para Sagardoy, este tipo de contrato "tiene mucho sentido", ya que ofrece al empresario "un pequeño margen de que si la empresa o el producto va mal, no va a tener un coste adicional".