Durante una entrevista a Servimedia, Sáenz de Santamaría emplazó al presidente del Gobierno a aprovechar su asistencia este domingo a la fiesta minera de Rodiezmo (León) para explicar a los ciudadanos "cómo va a sufragar y cómo va a articular en las cuentas públicas" el pago de las pensiones ante el incremento del paro y la disminución en el número de afiliados a la Seguridad Social.

"Zapatero tenía que aprovechar el acto de Rodiezmo para tranquilizar a los pensionistas de que van a cobrar sus pensiones y a los trabajadores de que las vamos a cobrar en su día. Para eso, en Rodiezmo debería presentar un programa económico completo para mantener la sostenibilidad del sistema de pensiones, para ver cómo las va a sufragar y cómo va a articular las cuentes públicas, porque unas de las prestaciones sociales que está subiendo exponencialmente son las prestaciones por desempleo", dijo.

Sáenz de Santamaría lanzó un aviso al Ejecutivo con la vista puesta en los próximos años: "O se toman medidas o puede haber problemas con las pensiones". A su juicio, es necesario "retomar" el Pacto de Toledo, como Mariano Rajoy le pidió a Zapatero durante la entrevista que mantuvieron en el mes de julio, para tomar las medidas necesarias que permitan "atajar la crisis" que atraviesa la economía.

Con 2,5 millones de parados y 250.000 afiliados menos a la Seguridad Social en el mes de agosto, la portavoz popular alertó de que "por primera vez desde 1996 hay menos trabajadores por cada pensionista". A su juicio, esto hace "urgente" una reunión del Pacto de Toledo para "mantener la sostenibilidad del sistema de pensiones" y evitar que, como le ocurrió al PP cuando ganó las elecciones en 1996, haya que pedir un crédito para pagar la Seguridad Social.

"En primer lugar, hay que tomar medidas para atajar la crisis y que no se destruya empleo; Si se genera empleo, se consigue mantener el ritmo de cotizaciones y seguir subiendo el número de activos por el de pasivos. también hay que incentivar que, voluntariamente, determinadas personas puedan prolongar un tiempo su dedicación al trabajo en la edad de jubilación sin que suponga una merma de los derechos adquiridos, incluso incentivando. Y hay que seguir garantizando el Fondo de Garantía de la Seguridad Social", expuso a modo de solución.

COMPARECENCIA DE ZAPATERO

Sáenz de Santamaría manifestó que el próximo miércoles deberían quedar claros los planes económicos del presidente del Gobierno, ya que comparecerá a petición propia ante el Pleno del Congreso de los Diputados a las nueve de la mañana para dar cuenta de las medidas con las que piensa hacer frente a la crisis.

La portavoz parlamentaria indicó lo que su partido espera de Zapatero en ese debate: "Que se ponga las pilas. Que se ponga a trabajar de una vez por todas, que deje de marear la perdiz, que deje de generar debates para tapar otras cosas, que se ponga a trabajar, ganar las elecciones no es un premio es una responsabilidad y lleva varios meses sin ejercerla".

Asimismo, subrayó que la situación de la economía española es muy delicada porque el déficit público del Estado "es ya una realidad" y "en poquísimos meses" habrá absorbido el superávit logrado durante la pasada legislatura.

La culpa, según dijo, es del Gobierno por aprobar "medidas tan frívolas como los 400 euros, que trata mejor al millonario que al mileurista" y que tendría que haberse sustituido por soluciones "mucho más justas que permitieran mantener los derechos sociales".

RECORTE EN DERECHOS SOCIALES

La portavoz del Grupo Parlamentario Popular en la Cámara Baja adujo que el incremento del paro, el auge de las hipotecas y el aumento de los precios está provocando un "recorte de derechos sociales", ya que considera que "cuando los españoles se van al paro se recorta el derecho al trabajo, que es el mejor derecho social" que puede existir.

"Cuando suben los tipos de interés, se recorta el derecho a la vivienda; cuando sube la inflación, se está recortando la capacidad adquisitiva y se está imponiendo el impuesto más injusto a los españoles. Es decir, se están recortando derechos sociales porque se es incapaz de atajar la crisis", añadió.

Sáenz de Santamaría lamentó coincidir con los expertos en que la crisis económica va a ser "larga y complicada" y lamentó que desde el Partido Socialista no se avisara a los ciudadanos durante la campaña de las elecciones generales, que se celebraron en el mes de marzo.

"Alguien tendrá que explicar desde el Gobierno por qué no advirtieron a los españoles desde hace meses que esto se veía venir, ya que hubiera permitido a los españoles hacer sus cuentas, a los empresarios y autónomos organizarse y preparar el futuro. Sin embargo, pidieron la confianza a la gente en una mentira y ahora tendrán que dar explicaciones de por qué no dijeron la verdad", sentenció.

La dirigente popular apuntó que el Gobierno tiene la "obligación" de plantear soluciones a la crisis económica y anunció que el Partido Popular no se va a limitar a "criticar todo lo que nos parezca mal". Señaló que dispone de una "alternativa" y, por eso, pidió al Ejecutivo "humildad y espíritu de consenso" para aceptar algunas de las medidas que le ofrezca la oposición.

"Queremos colaborar para que la crisis sea corta, no queremos volver a recibir un gobierno como el que recibió el PP en 1996. Solbes es experto en meternos en crisis y el PP es experto en sacarnos de esa crisis, pero entremedias se lleva por delante un bienestar que los españoles tenían estos años y al que se han acostumbrado", remachó.

Sáenz de Santamaría sacó a relucir el "Plan de Austeridad" que ha elaborado el Partido Popular para el conjunto de las administraciones públicas y que ya están aplicando algunos de sus alcaldes y presidentes autonómicos mediante el recorte del gasto público, la supresión de altos cargos y la congelación del sueldo de los dirigentes.

Afirmó que el Gobierno de Zapatero debería seguir el mismo ejemplo y "evitar gastos superfluos" como el que, en su opinión, representa la creación de 70 nuevos altos cargos con respecto a la anterior legislatura. También abogó por eliminar la "duplicidad de trámites" y emprender las reformas necesarias para que la Administración General del Estado funcione "mejor y de una manera mucho más eficaz".