Múgica declaró a Servimedia que "los espacios públicos de los pueblos y las ciudades tienen que estar dedicados a la gente de bien que ha sido asesinada en esta tierra, en ningún caso a los asesinos ni a los criminales".

Por este motivo, opinó que en Zizurkil, municipio gobernado por el PNV, se ha realizado "un importantísimo acto de reparación a la memoria de las víctimas del terrorismo".

La decisión de este ayuntamiento guipuzcoano se produce después de que las familias de Fernando Múgica y de Miguel Ángel Blanco denunciasen el 24 de marzo al Consistorio de Zizurkil por mantener una plaza con el nombre del etarra José Luis Geresta.

Este terrorista fue uno de los que participó en los asesinatos de Fernando Múgica y de Miguel Ángel Blanco, cuando formaba parte del "comando Donosti".