En una rueda de prensa en el Congreso, Pérez Rubalcaba acusó a Hernando de "mostrar una actitud agresiva sin explicación", porque él, aseguró, no conocía ni se refería a su situación personal cuando reprochó al PP su "sobreactuación".

Indicó que "si he sufrido una agresión por parte del señor Hernando, no lo sé, le vi excitado, me dí media vuelta", por lo que si hizo algún "amago, no lo sé no lo vi, cuando vi que se excitaba en demasía me di media vuelta y me fui porque mi intención no era provocar un incidente".

"No quiero magnificar un suceso que ya es suficientemente dramático", agregó, pero "esta es la casa de la palabra, y en la casa de la palabra no se puede hacer otro tipo de manifestación física", por lo que el incidente merece el "reproche" de los ciudadanos.

Apuntó que en el Congreso sólo se puede "hablar, a veces duro, a veces blando, a veces risueño, a veces más tenso", pero no otra cosa, y resaltó que "esta actitud no es casual ni es novedosa, llevamos una legislatura especialmente tensa", con faltas de respeto a la Presidencia.

Este "proceso de crispación creciente" tiene, para Rubalcaba, "dos explicaciones: que el PP no ha sido capaz todavía de asumir su derrota electoral y permamente ejercicio de crispación en la vida pública de este país", y que tiene "sus problemas internos, y se están viviendo en clave de quién es más duro".

Esta posición "absolutamente fuera de lugar, excesiva, vociferante", continuó, es una muestra de que la "situación interna tampoco ayuda", porque se da en ese partido una "carrera de a ver quién chilla más para hacerse con el liderazgo del PP".

En cuanto a la investigación abierta por el presidente del Congreso, Manuel Marín, dijo que, "por suerte para mí hay cámaras que pudieron seguir el incidente", y explicó que lo de fuera no es más que un "pálido reflejo de lo que vimos ayer dentro de la Diputación Permanente".

Preguntado sobre si llamó "caradura" a Hernando con un gesto, Rubalcaba reconoció que "es posible, pero no lo sé", aunque quiso dejar claro que "en el hemiciclo, ese gesto se produce cincuenta veces".

Insistió en que Hernando mostró una "actitud agresiva sin explicación", por lo que la petición de que se disculpe "me parece un poco excesivo", ya que "hay currículos en la Cámara, para ver qué actitudes tenemos unos y otros, y yo me enorgullezco mucho de la actitud política que he tenido".