Nolla dijo que el cambio de Mónica Ridruejo por López Amor tiene "toda la pinta" de suponer un "paso atrás" en la elaboración de un plan de futuro serio para RTVE. "Nosotros concedemos un margen de confianza al nuevo director general y le juzgaremos por sus hechos, no por su procedencia", indicó.

El portavoz de los trabajadores afirmó que no es descabellado pensar que el nuevo director general no asumirá el Plan de Renovación elaorado por el equipo de Mónica Ridruejo, ya que "una de las hipótesis más razonables sobre la salida de Ridruejo es que el Gobierno no aceptó su plan de futuro".

"Es sensato pensar que el plan sufrirá un parón definitivo o de muchos meses. No me refiero en concreto al 'Plan Renove' de Ridruejo, sino a cualquier plan de futuro para RTVE sobre el que discutir", afirmó Nolla, para añadir que "no aceptaremos ninguna chapuza".

El cambio viene objetivamente, dijo, a paralizar la discusión sobre el futur de la radiotelevisión pública. "Esto no es una acusación hacia él", afirmó el presidente del CGI, que ayer mismo solicitó una entrevista con Fernando López Amor.

"Esperamos que la nueva dirección general no tome medidas precipitadas sin conocer antes las verdaderas necesidades de RTVE, porque desde fuera se tiene la costumbre de considerar a la radiotelevisión pública un monstruo al que hay que combatir", concluyó.