En una conferencia pronunciada en el Club Siglo XXI, bajo el título "Radiotelevisión Española ante el nuevo milenio", Cabanillas sugirió, desde el respeto al poder legislativo, cinco puntos básicos para su inclusión y desarrollo en el nuevo marco legal que definA y regule las actividades y organización del grupo RTVE.

En primer lugar, la confirmación de la función global de servicio público, concepto acuñado y reconocido por la normativa comunitaia que debe ser incorporado a la legislación española. En segundo término, la atribución de competencias a las Cortes Generales en materia de tanta importacia como garantizar la independencia del presidente o director general de RTVE.

Cabanillas defendió también la reforma del Consejo de Administración de RTVE, sustituyendo la actual representación política de sus miembros por la participación en este órgano de los más significativos sectores de la sociedad, así como el reconocimiento en el nuevo text legal de un sistema de financiación diversificada.

A su juicio, en este sistema de financación debería tener preponderacia los fondos públicos y el diseño de un nuevo modelo de organización para RTVE más flexible y eficaz, que responda a las demandas de un sector competitivo y cambiante.

En su análisis de la situación de RNE y TVE, Cabanillas aseguró que, al margen de circunstancias exteriores, ambos medios sostienen con ventaja la comparación con los más importantes organismos públicos europeosde radio y televisión, no sólo en el servicio que prestan, sino también a la vista de los medios de que disponen.

Asimismo, se mostró partidario del mercado abierto a la competencia y aseguró que su defensa de la radio y la televisión públicas no es incompatible con su deseo de una convivencia pacífica con los medios audiovisuales comerciales.

Destacó como logros de sus once meses al frente de RTVE la reducción de la deuda acumulada, la optimización de recursos, la apuesta por la producción de conenidos y la potenciación de emisoras y centros territoriales.

Finalmente, expresó su esperanza en la pronta implantación de un nuevo modelo que garantice la continuidad de los medios públicos audiovisuales españoles y su homologación con las organizaciones europeas de su misma naturaleza.