En un encuentro con periodistas españoles en París, Roverato comentó que en los últimos años han "desarrollado mucho" su "posición en España", y que cuenta con una "excelente cartera de pedidos", sobre todo a través de su división energética.

El presidente de Eiffage explicó que la compañía "no es candidata para grandes obras en España" por sí sola, pero "somos socios en proyectos importantes en los sectores de la energía e infraestructuras".

Roverato cree que las turbulencias económicas en España durarán dos años, y quiso valorar la decisión del Gobierno de acelerar la obra pública para compensar la rebaja de la actividad de construcción residencial.

Además comentó que "el sistema bancario español es fantástico", aunque eso "no significa que todos los promotores españoles se han mostrado razonables".

El presidente de la gala señaló que en la Penísula Ibéricacuentan con unos 50.000 colaboradores, que actúan baja el logotipo de Eiffage y "parece que no se sienten avergonzados".