LA ROTURA DE UNA CONDUCCION DE AGUA PROVOCA UN SOCAVO QUE COLAPSA EL TRAFICO EN EL CENTRO DE MADRID
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Una rotura en una conducción de agua del Canal de Isabel II produjo a primeras horas de la madrugada un socavón de importantes dimensiones en la calle Génova, que, durante la mañana, provocó un colapso circulatorio en esa zona de Madrid.
Según informó a Servimedia un portavoz de la Policía Municipal, la avería se produjo sobre la una de la madrugada frente al número 7 de la calle Génova, al romperse una conducción de aguade 300 milímetros de diámetro, lo que originó un socavón de 25 metros de largo por 6 de ancho e inundó parte de la zona.
Debido a sus dimensiones, la anchura del boquete ocupó los dos carriles de circulación de la calle en sentido a Alonso Martínez, que quedaron inutilizados al tráfico, por lo que sólo fue posible transitar por esa calle hacia la Plaza de Colón hasta las nueve de la mañana.
Sin embargo, a partir de esa hora, la Policía Municipal decidió impedir el paso por toda la vía en ambos setidos, ya que, según explicó un portavoz del Gabinete de Tráfico del Ayuntamiento, surgió la duda de si el agua pudo formar una bóveda bajo la calzada, que pudiera producir un hundimiento de la calle al circular los vehículos por ella.
El corte de esa vía, vital para el tráfico de media mañana, al ser una de las más importantes áreas comerciales de la ciudad, produjo un colapso circulatorio en las zonas aledañas, como la calle Goya, Plaza de Colón, Paseo de Recoletos, Paseo de la Castellana, calle de lcalá y en las pequeñas calles colindantes, por donde tuvieron que ser desviados los vehículos.
Por su parte, un portavoz del Canal de Isabel II indicó a Servimedia que las causas de la rotura fueron fortuitas, aunque señaló que el socavón no fue provocado por la avería, sino que fue hecho por los técnicos de la compañía, que abrieron la calzada para localizar el tramo dañado. A media mañana los operarios continuaban trabajando para subsanar la rotura.
Asimismo, indicó que no provocó el desabasteimiento de agua a los usuarios de esa zona, ya que el suministro fue desviado por otra de las múltiples arterias que hay en el área.
También fue necesaria la presencia de los bomberos, que nada más producirse la rotura inspeccionaron los edificios situados en las proximidades, aunque, según informó un portavoz del Cuerpo, la avería no afectó a la estructura de los inmuebles ni fue necesario achicar agua de los sótanos.
(SERVIMEDIA)
07 Feb 1992
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