Hacia las 5,45 de la mañana, se produjo una avería en una tubería situada en el kilómetro 10,500 de la N-V, en dirección Madrid, que inundó parcialmente la calzada, por lo que los vehículos sólo podían transitar por uno de los tres carriles de que dispone la autovía.

Una brigada del Canal de Isabel II se trasladó al lugar del suceso y procedieron a reparar la tubería. Además, avisaron a la Policía Municial y a los bomberos, que achicaron el agua acumulada en la carretera.

La coincidencia con la hora "punta" de entrada de coches a la capital provocó que pronto se formara un tapón, que alcanzó más de 5 kilómetros de caravana, según fuentes del Servicio de Control de Tráfico del Ayuntamiento.

La rotura fue reparada sobre las 8 de la mañana y el tráfico por los tres carriles quedó restablecido media hora más tarde.

Sin embargo, la apertura de los tres carriles trasladó el problema al centro de adrid, ya que la avalancha de vehículos ocasionó nuevos atascos en el Puente del Rey, en el acceso a la M-30.

Fuentes del Canal de Isabel II explicaron a Servimedia que la avería afectó a zonas del distrito de Latina, donde los vecinos tuvieron problemas de presión de agua, sobre todo los de las viviendas situadas en los pisos superiores.