Piqué Vidal compareció hoy en calidad de inculpado pos su condición de ex consejero de Grand Tibidabo y por los supustos delitos de falsedad, estafa y apropiación indebida.

Según explicó al juez instructor del caso, muchas de las operaciones investigadas por la justicia y llevadas a cabo por De la Rosa no fueron tratadas en el consejo de administración de la empresa, y él mismo se enteró de algunas a través de los medios de comunicación.

Entre las operaciones figuran préstamos y pagos de comisiones de Grand Tibidabo a diversas empresas o a sociedades patrimoniales del financiero, como Diagonal Investment, Quai, Nuevo Atardecer y Nueva Madrugada.

Juan Piqué Vidal, que ocupó el cargo de consejero de Grand Tibidabo entre 1991 y abril de 1994, negó que hubiera cobrado dinero de esta sociedad y haber puesto la condición de que La Caixa le cancelara un préstamo personal de 600 millones para dar su visto bueno a la venta de acciones de Grand Península, empresa que impulsó la creación de Port Aventura, a esa entidad bancaria.

El ex consejero de la misma empresa y ex asesor de De la Rosa, Juan José Folchi, quetambién declaró hoy como inculpado ante el juez Aguirre, coincidió con Piqué en que muchas de las operaciones hechas por el financiero no fueron comunicadas al consejo de administración y aseguró que "no se pidió autorización" a este órgano sobre la concesión de un préstamo a Quail España, sociedad del financiero.

Los interrogatorios a los nuevos inculpados por la descapitalización de Grand Tibidabo seguirán el miércoles y jueves de esta semana. Entre otros declararán el hijo del presidente del ComitéOlímpico Internacional, Juan Antonio Samaranch Salisachs, Santiago Tomeo y Alfredo Fraile, asesor de imagen de De la Rosa.