Romay reconoció que Fraga ha repetido en numerosas ocasiones que sólo concurrirá como candidato en los comicios que se celebrarn el próximo mes de octubre y dijo sentirse satisfecho de haberlo convencido para que se presentase en las elecciones de 1989 desde su cargo de presidente del PP en La Coruña.

Esta fue "una buena idea", pues, a su juicio, "este paso de Fraga por Galicia se está notando, con una gestión importante y un prestigio personal que llena de satisfacción a muchos gallegos".

El consejero de Sanidad señaló que "si dentro de cuatro años lo vemos igual que hoy pues a lo mejor somos más de uno los que les decios... pues hay que seguir adelante. El ahora dice muy terminantemente que es el último mandato" (si revalida su victoria en octubre).

"Yo no digo nada. Ahora, afortunadamente está muy bien. Parece que no va a ser posible que le convenza nadie, pero habrá que esperar", añadió.

Romay Beccaria es uno de los pocos líderes del PP con posibilidades de suceder a Fraga, aunque en los últimos meses, dirigentes políticos de su partido y de la oposición detectan que ha perdido posiciones con respecto al conejero de Obras Públicas y secretario general del PP gallego, José Cuiña.

En su opinión, que otros le situen entre los colocados "es cosa de los demás. Yo no estoy en esa carrera y no me miro en esa situación". "Es una cuestión evidentemente prematura y lo será mientras el partido no se plantee esa cuestión cuando corresponda", concluyó.