Tampoco el juez de la Audiencia Nacional Baltasar Garzón se salvó de las críticas y uno de los sindicatos legó a llamarle "payaso" y a calificar de "circense" su actuación.

Fuentes de la Asociación Nacional de Policía Uniformada (ANPU) destacaron las contradicciones suscitadas respecto a dichos documentos y la falta de coordinación entre mandos policiales y funcionarios, y pidieron seriedad en las manifestaciones de los responsables del departamento, porque "no se puede decir un día una cosa y otro día otra".

Agregaron que los responsables políticos del ministerio no deben implicar a funcionarios del uerpo Nacional de Policía, "sino que la parte policial debe quedar al margen de esas historias políticas. Nos parece muy mal que utilicen sectores profesionales y a gente que está trabajando honradamente", añadieron.

El secretario general del Sindicato Unificado de Policía (SUP), José Manuel Sánchez Fornet, expresó su satisfacción por las declaraciones de Margarita Robles afirmando que los comprobantes del viaje de los policías existen, "ya que el espíritu que entendíamos que había traído Belloch al mnisterio de transparencia y claridad, si al final seguía funcionando la trituradora se nos venía abajo. El hecho de que los documentos estén y se pueda investigar nos parece que es lo mejor que puede pasar".

No obstante, dijo que es necesario investigar este asunto pronto, "ya que esto de que se haya traído a Roldán y los policías hayan ido a declarar ya 17 veces y Roldán no empieza a cansar, porque hay una presunción de culpabilidad contra la policía que empieza a ser molesta".

En su opinión, huo "una absoluta falta de coordinación" entre los responsables políticos y los funcionarios policiales, pero matizó que esa descoordinación existe en el ministerio desde su constitución, debido a la forma en que se han hecho los nombramientos. "Esto ha demostrado falta de coordinacioón y a ver si les sirve de escarmiento para resolverlo", indicó.

Respecto a la presunta utilización política del CNP, dijo que a la policía "la utiliza todo el mundo". "A nosotros lo que nos hace falta es no estar en el ojodel huracán, donde estamos desde la 'Ley Corcuera'".

GARZON, UN "PAYASO"

Por su parte, Javier Santaella, secretario general del Sindicato Profesional de Policía Uniformada (SPPU), criticó duramente la actuación del juez Baltasar Garzón, que ayer interrogó al director general de la Policía, Angel Olivares.

Santaella afirmó que, cuando vio descender a Garzón de su vehículo a las puertas de la Dirección General de la Policía, "no sabía muy bien si estaba viendo al juez o al payaso", ya que, a su jicio, "siempre causa cierto sonrojo que la justicia haya llegado a esos niveles circenses".

El dirigente sindical precisó que la ley contempla que Garzón se desplace a tomar declaración a Olivares en su despacho, pero "lo que no está contemplado es que dé el espectáculo saliendo del coche, porque además podía haber metido el coche dentro" del edificio.

"Hay muchas formas de realizar el trabajo", continuó Santaella, quien criticó el protagonismo que adquieren los casos que instruye este juez, que no se corresponde con los resultados que obtiene al final".

En su opinión, Margarita Robles "ha perdido un poco los estribos" en este asunto y "se ha llegado a la descoordinación total y a lo que siempre dijimos que se producía de forma tapada pero que ahora ya se ve muy claro: la utilización de profesionales para fines políticos, y al final salen las chapuzas que salen".

Finalmente, Santaella señaló que no tenían que haberse utilizado fondos reservados para sufragar el viaje de los policías a Talandia, ya que existen unas dietas previstas para ello. "A partir de ahí empiezan las luchas políticas, que si están los papeles, que si no los dan, que si lo instruyo yo o no los instruye la otra, y al final la sensación que se da a la sociedad es de un ridículo absoluto de las instituciones, tanto por parte de la policía como por parte de Garzón, que debe investigar a fondo los asuntos pero también debe guardar las formas", concluyó.