Rojo, durante una conferencia impartida dentro de los cursos de verano de la Universidad Complutense, señaló que dentro del proceso abierto en Euskadi tras el alto el fuego de ETA, si bien "la herida debe cerrar", nadie, "ni siquiera la sociedad española", puede exigir a las víctimas "la reconciliación con los criminales" de la banda terrorista.

Pero por otro lado, el presidente de la Cámara Alta pidió que representen "ética y moralmente la decencia" de nuestro país, para lo cual considera que no deben "caer en el partidismo" y representen de esta forma "la pluralidad" de la sociedad española.

En este sentido, volvió a solicitar a las víctimas de ETA que actúen "con independencia y altura de miras" por el bien de todos" y que sigan dando ejemplo "resistiendo la tentación de la venganza".

Afirmó que no van a permitir que "desde la manipulación y la mentira" se dude de la lealtad del Gobierno socialista "con las instituciones y con las víctimas del terrorismo".

Rojo dijo que el proceso del País Vasco "no es para estar "televisándolo ni radiándolo todos los días", ni tampoco para estar "mal informando", porque, añadió, existen informaciones "que no se corresponden con la realidad".

Asimismo, indicó que "HB ya no existe" y que lo que hay en Euskadi "son ciudadanos que se ubican en la izquierda abertzale sin formación política", es decir, "ciudadanos que se sienten identificados" con una determinada ideología, pero que no tienen "una formación política".

"El conjunto de la sociedad española sin excepción lo que quiere es que de una vez por todas se termine con el terrorismo y la violencia y que podamos disfrutar de una vida en paz y en libertad", concluyó el presidente del Senado.