Los monarcas fueron recibidos por la corporación sevillana en pleno y su alcalde, Alejandro Rojas Marcos, hizo entrega a don Juan Carlos y doña Sofía de las llaves de la ciudad y del bastón de mando de la alcaldía.

Posteiormente, los reyes descubrieron un placa conmemorativa de la reapertura de la casa consistorial sevillana, situada en la céntrica plaza Nueva.

El rey Juan Carlos manifestó la satisfacción de todos los miembros de la Familia Real por encontrarse en el Ayuntamiento de Sevilla, que "es la representación de una ciudad hospitalaria, alegre y maravillosa, a la que tanto queremos".

Don Juan Carlos agregó que "Sevilla es una ciudad que se constituye en protagonista de uno de los acontecimientos más impotantes del año que estamos viviendo, la Exposición Universal que tuvimos el honor de inaugurar ayer".

Por su parte, el alcalde de Sevilla mostró su gratitud por la presencia real en esta nueva apertura del Ayuntamiento hispalense. Alejandro Rojas Marcos señaló que "Sevilla es una ciudad agradecida y por ello no olvidará nunca que gracias al rey don Juan Carlos la Expo-92 se celebra ahora en nuestra ciudad".

Dirigiéndose al monarca, el primer edil agregó: "No sólo hicisteis honor a vuestro título e rey de Sevilla, sino que os habeis convertido en el primer sevillano".

Tras abandonar el Ayuntamiento, los monarcas asistieron a la inauguración de la nueva sede de la Presidencia del Gobierno andaluz, ubicada en el histórico edificio del Palacio de San Telmo, donde se celebró también una recepción oficial.

Con estas dos inauguraciones, los reyes concluyeron su visita oficial de dos días a Sevilla y partieron hacia Madrid en el tren de alta velocidad (AVE).