EL REY INSISTE EN LA NECESIDAD DE LA INTEGRACION DE LAS FUERZAS ARMADAS EN LA SOCIEDAD EN LA CELEBRACION DE LA PASCUA MILITAR
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El rey don Juan Carlos insistió hoy durante la celebración de la Pascua Militaren la necesidad de que las Fuerzas Armadas estén integradas en la nación y en el orden constitucional, con el fin de que exista una "perfecta integración" de los militares en la vida del país "y que todos los ciudadanos se sientan orgullosos de sus ejércitos".
"Nunca como en los momentos de desconcierto y de cambio necesitan las sociedades libres la presencia y la seguridad de sus Fuerzas Armadas", agregó el Monarca, quien abogó por la implicación de la opinión pública en la Defensa nacional, informádola "claramente" de lo que es la actuación normal de las Fuerzas Armadas.
Tras hacer un repaso de la significación del año 1992 para España, del que resaltó los acontecimientos celebrados con motivo del V Centenario o las Olimpiadas, que fueron "una muestra de la vitalidad de España", indicó que 1993 puede caracterizarse también por "novedades imprevistas y tal vez precupantes".
Dijo que la construcción europea puede presentar dificultades que deberán ser superadas combinando "nuestro sentido ncional con la idea de una comunidad más amplia en la que, sin embargo, no hemos de perder nuestra propia identidad".
Agregó que, por ello, los españoles "debemos sentirnos orgullosos" de que España mantenga un comportamiento "vigilante" y un afán de cooperación, "sin egoismos ni dudas", para lo que debemos ser "cada vez más abiertos y comunicativos".
No obstante, afirmó que "no es hora de pesismismos" ni de discrepancias, sino de "unión, comprensión y de ilusiones", y señaló que las soluciones alos problemas deben buscarse "sin miedo" y mediante el entendimiento y la vinculación entre el Estado y la sociedad.
Finalmente, al igual que hizo posteriormente el ministro de Defensa, Julián García Vargas, el Rey dedicó unas palabras de recuerdo hacia el anterior jefe del Estado Mayor de la Defensa, Gonzalo Rodríguez Martín-Granizo, fallecido el pasado mes de diciembre y expresó su confianza en su sustituto, el teniente general José Rodrigo Rodrigo.
Asimismo, expresó su profundo agradecimiento or la concesión al Conde de Barcelona del empleo honorífico de Capitán General de la Armada, "con el que se honra a un gran español, que en estos momentos es presa de la enfermedad".
Con anterioridad a las palabras del Rey, García Vargas hizo un repaso a la evolución de las Fuerzas Armadas en 1992, destacando las novedades introducidas el pasado año en los Ejércitos, como la reducción del servicio militar o la participación de soldados españoles en las misiones de paz de la ONU, y advirtió de que las ificultades económicas sufridas por el ministerio el pasado año continuarán durante 1993.
El acto de celebración de la Pascua Militar comenzó pasadas las diez de la mañana con la llegada de los Reyes y el Príncipe de Asturias a la Plaza de la Armería del Palacio Real, donde una agrupación de la Guardia Real les rindió honores de ordenanza.
Posteriormente, don Juan Carlos y doña Sofía recibieron en audiencia al Consejo de Administración del Patrimonio Nacional, la Diputación Permanente y el Consej de la Grandeza de España, así como a los presidentes del Tribunal Constitucional, del Tribunal Supremo y del Consejo General del Poder Judicial.
Más tarde, tuvo lugar la recepción militar en la Saleta de Gasparini, donde los monarcas saludaron al presidente del Gobierno, Felipe González, y a los ministros de Defensa e Interior, José Luis Corcuera, así como a las representaciones militares, encabezadas por los jefes de los Estados Mayores de los tres Ejércitos.
Tras este acto, los Reyes y las autridades se trasladaron al Salón del Trono, donde, antes de los discursos de felicitación de la Navidad a los miembros de las Fuerzas Armadas, don Juan Carlos impuso las condecoraciones concedidas con motivo de la Pascua Militar.
(SERVIMEDIA)
06 Ene 1993
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