Tras rechazar que el pacto firmado cn el PSOE sea fruto de su personalismo y de un desmesurado afán de poder, Revilla declaró hoy en Radio Nacional que "después de ocho años de convivencia (con el PP), el último año ha sido verdaderamente problemático".

Aseguró que los estrategas del PP habían diseñado una operación para desalojar al PRC del Gobierno autonómico, al pensar que iban a obtener la mayoría absoluta, pero no contaban con el ascenso electoral de la formación regionalista. Además, dijo que "mantener un pacto de otros cuatro año con el PP era inviable, dada la confrontación de programas e incluso de personas".

Tras el acuerdo alcanzado con el PSOE, Revilla se mostró convencido de que "esta región va a funcionar bien. Se necesita de vez en cuando que todos los partidos pasen por la oposición. El PP no lo había estado nunca y también le viene bien". "Aquellos que se enquistan en el poder se llegan a convertir en soberbios y a pensar que el poder es eterno"

Por otro lado, negó que esté teniendo problemas con los ciudadanoscuando pasea por las calles de Santander y dijo que "yo no tengo guardaespaldas, ni los voy a tener". "No he recibido ni una sola crítica (...) No estoy teniendo ningún problema".

También rechazó rotundamente que se trate de una cuestión de ambición personal. "Yo tengo 60 años y yo soy el padre de la autonomía de Cantabria. Yo fui la primera persona que creó un partido, en el año 76, para decir: la provincia de Santander tiene que llamarse Cantabria, y peleamos por una autonomía", dijo, para agregar qe durante su carrera política le han ofrecido ser el número 1 de todas las listas de los partidos estatales, "incluida la UCD con llamada personal de Adolfo Suárez (...) Mi ambición ya la tengo bastante superada".

Además, Revilla llamó "energúmeno" al ex presidente cántabro Juan Hormaechea y criticó duramente al presidente de Extremadura, Juan Carlos Rodríguez Ibarra, por catalogar al PRC como partido nacionalista. "¡Qué ignorancia más impresionante! El Partido Regionalista de Cantabria es la antítesi del nacionalismo. Nosotros somos profundamente españoles, por ser cántabros", dijo.

"Que nadie esté diciendo por ahí que somos algo parecido al PNV, cuyas teorías yo detesto, y cuyos personajes, los que están al frente de ese partido, detesto", añadió. "Que nadie confunda lo nuestro con algo parecido a lo vasco o a lo catalán".