Navarro estudia ahora iniciar acciones legales contra el ex jefe de cooperativas de la entidad, Cipriano García. Esta ampliación de la querella estaría originada por la declaración presentada hoy ante el titular del Juzgado número 1 de Zamora por el ex director general adjunto de la Caja, Pedro de Prada, y el subdirector general, Angel Alvarez.

Ambos aseguraron que Cipriano García le pidió 325.000 pesetas de la caja B para entregárselas a Navarro, con el fin de que éste no retrara las cuentas de la cooperativa que preside, que mueve anualmente 800 millones de pesetas.

Los ex directivos testificaron que García les entregó un recibo, supuestamente firmado por Marcelino Navarro, aunque después se comprobó que estaba falsificado. La semana pasada, el ex jefe de cooperativas negó haber percibido dinero alguno y aseguró no haber visto antes el recibo falsificado.

El ex director de la Caja Rural afirmó hoy que "sin ninguna duda se ha abusado de mi buena fe desde dentro de laCaja y he sido víctima de un engaño. Si la persona a la que entregamos el dinero para un tercero niega ahora ese extremo, entonces tanto Navarro como yo hemos resultado perjudicados, se nos ha engañado".

El letrado de Marcelino Navarro anunció la retirada de la querella contra De Prada y Alvarez porque la honorabilidad de su defendido "ha quedado totalmente a salvo". Sin embargo, no descarta ampliar la querella contra Cipriano García por un presunto delito de estafa, aunque según el abogado, debería sr el propio fiscal quien actuase de oficio "puesto que se han cometido además de un delito de estafa, un delito fiscal y una falisificación de documentos".