Tras explicar que el posible traslado a Barcelona de la sede de Retevisión no obedece a razones tecnológicas ni de estrategia, el dirigente sociaista destacó que es necesario que se oiga la voz de Madrid en este asunto, para defender los 500 puestos de trabajo existentes en la capital y para intentar que las inversiones futuras en elefonía se queden asimismo en la región.

Señaló que el 30% que tiene el Ministerio de Fomento en el accionariado de Retevisión debe de servir para que el PP y José María Aznar, presidente del Gobierno, se decidan en favor de la permanencia de la empresa en Madrid.

Lissavetzky hizo estas declaraciones en una rueda de prensa en la que se lamentó de que la Asamblea de Madrid no haya iniciado todavía sus actividades, hecho que ha imposibilitado que se debatiese sobre temas de actualidad, como el posble traslado a Barcelona de Retevisión o el aumento de la siniestralidad laboral.

Sobre este último asunto, mostró su preocupación por el hecho de que desde que la Comunidad ha asumido las competencias sobre accidentes laborales, el número de siniestros aumentó un 17%, con respecto a 1996.

Lissavetzky habló también del inicio del curso escolar y vaticinó retrasos en el traspaso de las competencias sobre la educación no universitaria y señaló no se podrá cumplir el compromiso de que estén recibida el 1 de enero de 1998.