Los resevistas que deseen participar en estas misiones tendrán que superar un proceso de selección que constará de un test psicotécnico, un reconocimiento médico y unas pruebas físicas.

Siempre se incorporarán al Ejército al que petenecieron y el compromiso que firmen no podrá exceder los nueve meses de duración.

La orden ministerial también permite a los soldados de reemplazo que estén cumpliendo su servicio militar como voluntarios en alguna misión internacional, adquirir la condición de soldados profeionales mientras dure la misión.

Los que ya son profesionales, podrán ampliar el compromiso que hubieran firmado para concluir la labor que están desarrollando en otro país.

El tiempo de compromiso de los soldados de reemplazo que quieran ser profesionales no podrá exceder de quince meses y los que ya son profesionales ampliarán el suyo por el tiempo que dure la misión y finalizará quice días después de que esta termine.

En todos los supuestos, los interesados cobrarán la retribución correspndientes a los militares de empleo de la categoría de tropa y marinería profesional, de acuerdo con el empleo que tuvieran o con el que hubieran pasado a la reserva y en función del tiempo de servicio que hubieran prestado con anterioridad.