Estas inversiones se destinarán fundamentalmente al pago de la instalación del depósito y de las conducciones exteriores de gas, según explicó hoy en rueda de prensa Ramón González Raurich, vicepresidente Ejecutivo de Repsol Butano.

Para ello, Repsol Butano ha alcanzado un acuerdo de colaboración con la Confederación de Empreas Instaladores (CONAIF), que reúne a más de 11.000 empresas de los sectores del gas, calefacción, climatización y agua.

La ventaja del acuerdo para los usuarios reside en que no tendrán que abonar las 500.000 pesetas que hasta ahora tenían que aportar para la instalación del depósito y que podrán realizar el pago en cuotas mensuales de 3.000 a 5.000 pesetas. Esa cuota dará derecho al alquiler del depósito, la instalación y el mantenimiento integral.

"Queremos facilitar a los usuarios la posibiliad de instalar nuestros servicios", explicó González Raurich. "Nos encargaremos absolutamente de todo y a mayor consumo habrá mejores precios".

Añadió que, con este plan, la compañía tiene previsto incrementar la cartera de clientes en unos 4.000 para el año próximo, además de suponer un volumen de negocio superior a los 5.000 millones de pesetas para el sector de instaladoras gasistas.

"Queremos ofrecer un mejor servicio y estar preparados para cuando lleguen los competidores. Repsol Butano tien que aprender a competir", agregó.

González Raurich señaló que en 1992 la facturación de Repsol Butano fue 123.900 millones de pesetas y explicó que, para 1992, pretenden elevarla hasta 137.000 millones.

La compañía cuenta con 37 factorías de transformación y envasado de butano y propano, 9 delegaciones comerciales y más de 60 centros de atención al cliente distribuidos en todo el territorio nacional

El uso doméstico del gas propano está muy poco difundido actualmente. Según datos hechos púbicos este mes por Gas Madrid, sólo 7.585 de sus 500.362 clientes reciben este tipo de gas.