"Nadie va a requerir la devolución de cualquier cantidad de ayuda que se haya podido hacer", declaró Piqué a la Ser, "porque son terceros que actuaro de buena fe, pensando que el Gobierno español había actuado con corrección".

Por ello, Piqué dijo que lo que estaría en discusión es si el Ejecutivo español tiene que devolver el importe de las ayudas a las autoridades comunitarias, "pero no que los particulares tengan en ningún momento que devolver las ayudas", aseguró.

A la pregunta de si el Gobierno español tiene previsto recurrir la decisión de la Comisión Europea, el ministro contestó que habrá que esperar a la notificación oficial, porque asta el momento sólo tienen un conocimiento oficioso del asunto. "Cuanto recibamos el texto definitivo, lo analizaremos y veremos las posibilidades jurídicas que abre", explicó.

Piqué aclaró que esta medida afecta únicamente al Renove Industrial, que estuvo en vigor entre 1995 y 1996 y por el que se concedieron más de 8.000 millones en ayudas a más de 5.000 empresas de transporte y transportistas particulares, y, dentro de él, cree que sólo a una parte de los perceptores de las ayudas.

Aunque insstió en que hay que esperar a conocer el texto definitivo, se mostró prácticamente seguro de que la decisión de la Comisión Europea se refiere sólo a las ayudas recibidas por los transportistas profesionales, que suponen, según dijo, unos 4.000 millones de pesetas, y no a personas individuales.