Cada uno de estos diez trenes contará con una composición de veinte coches, de los cuales ocho dispondrán de asientos de gran confort y diez serán de la denominada "gran clase", mientras que los dos vagones restantes serán la cafetería y el servicio de restaurante.

Dentro de cada convoy, uno de los vagones de "gran clase" contará con un diseño especial para personas con movilidad reducida, al disponer de cabina adaptada, con baño propio y una segunda plaza para un acompañante.

De este modo, según Bonache, el nuevo diseño del Trenhotel permitirá que los discapacitados "puedan acceder a cualquier parte del tren sin problemas".

Cada uno de estos diez convoyes, que supondrán una inversión de 144 millones de euros, permitirá transportar a unos 234 pasajeros y se intentará cambiar el clásico modelo de literas por asientos de gran confort reclinables para dormir.

Esto se debe, en parte, a la paulatina pérdida de interés de los usuarios por las literas, principalmente en clase turista, que registraron durante el pasado año una media de descenso de la demanda del 7%, y a una nueva visión del viaje nocturno en tren.

Estos trenes se destinarán para aquellos viajes que superen los 1.000 kilómetros, que tendrán su punto de partida principal en Barcelona y llegarán a alcanzar velocidades de 220 kilómetros por hora.

A pesar de que aún se siguen barajando diseños y de que los trenes comenzarán a funcionar en 2008, sí está confirmado que este "plus de confort" conllevará un incremento de precio acorde con las acciones que emprenda la competencia, y la compañía se plantea ya nuevas ofertas, como el "todo incluido", en la que el cliente pagaría un precio especial que incluiría viaje y cena.