Según informó hoy Renfe en un comunicado, los trenes han circulado en toda la red, a pesar del temporal de nieve que está azotando la Península desde primeras horas de este viernes.

"Las condiciones meteorológicas han generado los lógicos retrasos, pero no ha sido necesario cortar ninguna línea ni ningún servicio", afirma la compañía.

Además, los viajeros están siendo informados en todo momento de la situación por todos los canales a disposición de Renfe: megafonía en trenes, estaciones, información telefónica o Internet.

Debido a las inclemencias meteorológicas algunos trenes han visto limitada su velocidad, como está previsto en estos casos, lo que ha obligado a Renfe a suspender su compromiso de puntualidad en todas las líneas afectadas.

Así, en torno a las 10 de la mañana se ha limitado a 160 kilómetros por hora la velocidad de los trenes Avant entre la localidad toledana de La Sagra y Ciudad Real, y sobre las 11.00 horas se ha limitado a 200 kilómetros por hora la velocidad en los trenes AVE por acumulación de nieve entre Valladolid-Segovia y en el corredor Madrid-Zaragoza-Barcelona.

Igualmente, hacia mediodía se ha reducido la velocidad a 160 kilómetros en la línea Madrid-Barcelona entre Guadalajara y Calatayud por acumulación de nieve en la vía.

Los mayores problemas se están produciendo en la zona centro de la Península, especialmente en Castilla-La Mancha y en Zaragoza, donde casi todos los trenes han sufrido retrasos de mayor o menor relevancia.

El temporal de nieve ha afectado también a las Cercanías de Madrid, donde se están produciendo demoras de 30 minutos en las líneas que unen el centro con el norte y el corredor del Henares, aunque ninguna de las líneas está cortada.

Por su parte, las líneas que comunican Atocha con Aranjuez, Parla, Móstoles y Fuenlabrada funcionan con normalidad.