Los responsables de Renfe aseguran que esta mejora de los resultados se debe a la ofensiva comercial puesta en marcha por la empresa en las líneas donde el tren es más competitivo con otras modalidades de transporte, unido a un ajuste de la oferta en función de la demanda detectada, para no incurrir en gastos innecesarios.

Con esa política, Renfe logró reducir entre enero y junio los gastos de Largo Recorrido un 9,3 por cien, incidiendo de forma muy positiva en su cuenta de resultados, al pasar las pérdidas de esta unidad de negocio de los 8.524 millones de pesetas en el primer semestre de 1993 a 6.675 en el mismo período de este año.

La satisfacción en Renfe por esta evolución del negocio de Largo Recorrido es aún mayor, debido a que la mejora de resultados sitúa las pérdidas incluso 500 millones por debajo de lo previsto enel actual Plan de Empresa de la compañía.

No obstante, la dirección de Renfe señaló que la mejora de los resultados en Largo Recorrido podría haber sido aún mayor, de no ser por las dos huelgas convocadas en abril, mayo y junio, y que supusieron para la empresa una pérdida de ingresos de unos 2.000 millones de pesetas, con un impacto en la cuenta de resultados de unos 600 millones de pesetas.

Además, la notable mejora de resultados en Largo Recorido confirma las buenas previsiones de la direcciónpara esta Unidad de Negocio, ya que sitúa la cobertura de gastos con ingresos en el 75 por cien, y la aproxima aún más al objetivo de situarla en benficios en 1998, con la aplicación del Plan Estratégico que se pretende poner en marcha.