En rueda de prensa en Madrid, Van Boven explicó que su estancia en España arrancó el pasado lunes y, tras dos días en Madrid, viajó a Bilbao ya Vitoria. El próximo mes de marzo, el relator de Naciones Unidas hará público un informe en el que incluirá las conclusiones de la investigación y sus recomendaciones al respecto.

En la capital de España se reunió con representantes del Gobierno, del Parlamento, del Poder Judicial, de la Audiencia Nacional, del Tribunal Supremo, de Instituciones Penitenciarias, del Ministerio de Asuntos Exteriores, de 6 organizaciones civiles, con la Dirección de la Policía Nacional y de la Guardia Civil, además de cn el Defensor del Pueblo.

En el País Vasco se entrevistó con representantes del Gobierno, del Parlamento; con abogados, periodistas y víctimas del terrorismo; y con miembros de asociaciones contra la tortura, pro democracia, contra la violencia, etcétera.

En este sentido, Van Boven aseguró que ha recibido "información totalmente opuesta" en relación a la existencia de torturas según quien fuera el entrevistado.

Explicó que el Gobierno "en ningún momento" le ha negado que en España se produzcn casos aislados de torturas, aunque sí que haya una "práctica sistemática". "Hay documentadas algunas docenas de torturas. Esto son hechos. A mí me toca saber si es la punta del iceberg", dijo.

CONSIGNA DE ETA

Asimismo, indicó que el Gobierno le ha asegurado que la denuncia de torturas por parte de presos etarras se debe a una consigna de la banda terrorista para desacreditar al Ejecutivo y no se corresponde con la realidad.

Sin embargo, Van Boven sí que se ha entrevistado con personas que le an asegurado haber sufrido torturas, aunque no tiene constancia de que ninguna de ellas hubiera pertenecido a la banda terrorista ETA.

En cualquier caso, Van Boven indicó que "el mero hecho de pertenecer a la Unión Europea no garantiza que no existan problemas" y apuntó que otros países de la UE han sido condenados por prácticas similares.

DISPERSION

Preguntado por la dispersión de los presos de la banda terrorista ETA en cárceles lejanas al País Vasco, el relator de la ONU señaló que "la distacia dificulta la vida tanto del preso como de la familia".

Asimismo, aseguró estar al tanto de la petición del Gobierno vasco de que estos reclusos no fueran trasladados a penitenciarías a más de 400 kilómetros de Euskadi.

El objetivo de este viaje es investigar la existencia o no de torturas y malos tratos, los actos de violencia y terrorismo, la detención en régimen de comunicación, las salvaguardas que se garantiza a los presos, indemnizaciones a las víctimas de la tortura, prevención de la totura, las condiciones en prisión, el papel de los medios de comunicación, la aplicación de las normas de la ONU y de la UE y la lucha contra la impunidad.

Según el Gobierno español, la visita del relatro de la ONU se enmarca dentro del compromiso del Ejecutivo de apoyar los mecanismos de protección de los derechos humanos.