El nuevo modeo de política medioambiental de la UE es la continuación del Quinto Programa de Acción de 1992 y su versión revisada de 1998. El Sexto Programa de Acción, que establece una lista de acciones prioritarias, deberá ser adoptado por el Consejo y el Parlamento mediante procedimiento de codecisión.

"Medio Ambiente 2010: nuestro futuro, nuestra elección" se basa en las consultas realizadas por la Comisión en noviembre de 1999 con motivo de su evaluación global del programa comunitario de política y actuaciónen materia de medio ambiente y desarrollo sostenible, que a su vez se elaboró a partir de un importante informe de la Agencia Europea del Medio Ambiente sobre el estado actual.

La evaluación global presentó un cuadro ambiguo sobre la eficacia de la política medioambiental de la UE y criticaba la deficiente aplicación por parte de los Estados miembros de las directivas comunitarias en este ámbito. Además, resaltaba la escasa identificación de las partes interesadas con los objetivos medioambientales. El nuevo programa subraya la necesidad de que los Quince apliquen mejor la legislación existente, por lo que la Comisión anuncia que aumentará la presión sobre ellos, dando una mayor divulgación a sus incumplimientos.