En una reunión celebrada en Madrid, reumatólogos y gastroenterólogos manifestaron la necesidad de alcanzar un acuerdo con las autoridades sanitarias sobre el perfl del paciente candidato a recibir los llamados "coxibs", que supusieron una revolución frente a los antiinflamatorios clásicos al reducir sus efectos secundarios, especialmente las úlceras y el sangrado gastrointestinal, según afirmó Josep Maria Piqué, jefe del Servicio de Gastroenterología del Hospital Clínico de Barcelona.

Reconocieron que, a igual eficacia y daño menor, los médicos optaron por estos dos fármacos para evitar daños posteriores y se disparó su consumo. Gabriel Herrero Beaumont, jefe el Servicio de Reumatología de la Fundación Jiménez Díaz, recordó que en Estados Unidos los antiinflamatorios clásicos (AINE) han causado más muertes que el mieloma múltiple, el asma, el cáncer de cérvix o la enfermedad de Hodgkinm, y casi tantas como el sida.

Eliminar los efectos secundarios mejora, según este reumatólogo, el seguimiento del tratamiento y la calidad de vida de pacientes, que sufren importantes dolores articulares e inflamación, lo que les incapacita hasta en un 60% de los casos para esempeñar su trabajo tras 10 años de haber comenzado la enfermedad.

El Ministerio de Sanidad decidió exigir visado en toda España para la prescripción de estos antiinflamatorios, al sospechar que ambas especialidades se estaban prescribiendo para patologías distintas de las indicaciones de su ficha (artrosis y artritis reumatoide). Esta medida ya había sido implantada en Andalucía meses antes.

Tras esta decisión, los médicos deben adjuntar a la receta un informe que justifique la elección del fáraco y la Inspección da el visto bueno mediante un visado. Ambos reconocen que, en general, no se están rechazando su prescripción, aunque el proceso se complica y se saturan sus consultas.

Piden, además, que se realice un trabajo serio sobre el coste-efectividad de los dos fármacos, en comparación con los antiinflamatorios clásicos más un protector gástrico, que en los sangrados del intestino delgado no son efectivos.