Según Calvo Ortega, los estatutos del CDS dejan claro que es la Asamblea Nacional del partido la que debe aceptar o no la dimisión de Fernández Teixidó.

En la rueda de prensa en que anunció su marcha del cargo, el pasado martes, Teixidó justificó su salida por los malos resultados obtenidos en las elecciones catalanas y or el escaso apoyo que, a su juicio, está recibiendo del sector "suarista", perdedor del congreso extraordinario celebrado hace seis meses.

Sin embargo, matizó que esa decisión "no es irrevocable" y que sería el Comité Nacional del partido, en su reunión del sábado 28 de marzo, el que tendría la última palabra.

Los "suaristas" han calificado el proceder del ex secretario general como una "maniobra" para asegurarse la vuelta al cargo, ya que, argumentan, sus partidarios son mayoría en el Comité Naional y no aceptarán perder la Secretaría General.

Un dato que avalaría esta tesis, según han señalado repetidas veces, es el hecho de que Teixidó ha pedido a sus partidarios en ese órgano que permanezcan en sus puestos.

NO A UN CONGRESO EXTRAORDINARIO

Hoy, el presidente del partido, a su salida de una reunión con la Comisión Permanente de las Juventudes del CDS para abordar la crisis política centrista, afirmó que Teixidó es "un buen político" y recordó que él mismo le disuadió de que dimities.

Rafael Calvo Ortega, que en el pasado congreso extraordinario encabezó la "tercera vía", frente a los "renovadores" de Teixidó y a los "suaristas" de José Ramón Caso, comentó que los resultados de ese congreso fueron aceptados por los tres sectores enfrentados y que ese congreso ya "pertenece a la historia".

A este respecto, se mostró contrario a que la formación centrista celebre un nuevo congreso extraordinario para analizar la crisis desatada tras las elecciones catalanas, y rechazó de planoun posible congreso de autodisolución: "Debate, todo el que sea necesario; congreso extraordinario, no", advirtió.

Respecto a las acusaciones de "maniobra" contra Fernández Teixidó, Calvo Ortega dijo que este tipo de actitudes "no corresponden a su talante de persona recta, limpia y honesta (...) No acepto que eso se incardine en ningún tipo de juego".

Preguntado si cree que hay algún candidato idóneo para sustituir a Teixidó al frente de la Secretaría General, respondió: "No lo sé y esa es una dcisión que no me corresponde a mi (estatutariamente)".

Rafael Calvo Ortega aseguró tener "muy claro" el futuro del CDS: continuar "sin ninguna duda" en la vida política española. "¿Usted (periodista) cree que un partido porque tenga un resultado adverso tiene que desaparecer? ¿Porque dimita el secretario general se van a remover los cimientos?", preguntó.

Y respondió: "En absoluto. Un partido debe hacer frente con serenidad y coraje a sus problemas; y es lo que está haciendo el CDS. Por tanto, nose pueden extrapolar las cosas, porque no es el primer partido en que dimite un secretario general".

JUVENTUDES: ERROR DE TEIXIDO

Poco después de que Calvo Ortega mantuviese esta improvisada rueda de prensa en la sede nacional de las Juventudes del CDS, el secretario general de éstas, Carlos García, ofreció otra en la que reveló que él, al igual que Calvo Ortega, intentó convencer a Fernández Teixidó para que no se fuera.

"Me pareció que era un gesto innecesario y entendí también que podría serun error, precisamente, por la confusión y generación de incertidumbre que esto iba a producir", dijo.

A pesar de ello, no quiso desvelar si la formación que lidera apoyará a Fernández Teixidó para que vuelva a la Secretaría General, ya que "sería adelantar algo que ni siquiera está planteado. No sé cómo vamos a llegar a la Asamblea Nacional".

Carlos García manifestó que las Juventudes son absolutamente contrarias a la autodisolución del partido y explicó que ese mensaje, "que deslizó algún compaero", genera confusión y es "altamente negativo para la vida del partido".

"Yo creo", explicó, "que el hecho mismo que aquí nos juntemos 25 personas de todos los sitios de España -rompiendo un `puente'- significa una apuesta radical por la viabilidad del CDS".

No obstante, dijo, esa viabilidad no será posible si desde dentro del propio partido no se dejan de lanzar mensajes contradictorios a la opinión pública, sobre si "disolución sí o no", porque un partido no puede estar cuestionándose su futuo permanentemente.

"Desde aquí, la crítica hacia todos los compañeros que están generando desánimo en una militancia que, yo creo, ya empieza a estar curada de espanto", concluyó, no sin atacar también a determinados medios de comunicación en los que "haciendo algunos de gurús vaticinan un final cantado y la desbandada".