Rato, que se mostró "escandalizado" porque González haya dicho que tomará nota sobre este apoyo, señaló en rueda de prensa que "ningún partido político puede considerar que los respaldos expresos de ciudadanos pueden considerarse caramelos envenenados, otra cosa es que haya partidos que crean que todo lo que no sea sumisión a ellos sea romper las reglas del juego".

Sobre las declaraciones del presidente del Gobierno en relación a un posibl reparto de papeles entre el presidente de la patronal, José María Cuevas, y el presidente del PP, José María Aznar, Rato dijo que "Felipe González está buscando una campaña electoral ficticia, no con el PP, sino con el partido que le gustaría a él que fuéramos, y se inventa un fantasma".

Agregó que "no hay un partido en España más independiente de los interlocutores sociales que el PP y nunca hemos tenido el apoyo de un grupo importante de presión, no como Felipe González, que ha tenido apoyos vergonantes como Filesa".

Rato afirmó que la precampaña electoral se está desarrollando con acritud por parte del PSOE e invitó a González a recuperar la memoria histórica, no de los años 30, sino de los años 90 y sobre todo desde las últimas elecciones generales.

El presidente del Gobierno "debe mirar hacia atrás y ver si ha cumplido las promesas del cambio sobre el cambio", dijo Rato, que añadió que "es triste comprobar que un político en activo de la generación del señor González y de la España del 6, cuando ve El Guernica, lo único que le puede producir es el deseo de seguir avivando las memorias más tristes de la historia de España y no entender ese cuadro como un mensaje de conciliación".

Señaló que los ciudadanos deben decir si quieren un Gobierno inestable con González y un posible pacto con Pujol o Arzalluz o si quieren tener un gobierno estable con una mayoría suficiente "que desde el principio va a gobernar estableciendo un diálogo con los interlocutores sociales para sentar las bases deuna política de empleo similar a la de Alemania, que pasaría por un reforma fiscal y una política de diálogo con las comunidades autónomas para establecer un modelo autonómico de Administración única que impida la duplicidad de funciones".

Rato indicó que el PP no es partidario del despido libre, sino de una política de creación de empleo basado en la estructura de las pequeñas y medianas empresas a través de una reforma fiscal, "que deje de penalizar la creación de empleo de estas empresas y de los atónomos, con impuestos como el IAE, diseñados para perjudicar el empleo".

También dijo que el PP actuará con mayor rigor en los servicios sociales básicos como la sanidad "desde la austeridad y la eficiencia".