Rato, que clausuró el seminario sobre "La banca europea tras el euro", organizado por Argentaria y el diario "The Economist", recordó que el objetivo de déficit público fijado para 1988, del 2,2%, ya va más allá de los exigido por este programa.

Aseguró que el Gobierno no tiene "ninguna duda" de que se cumplirá esta previsión, gracias a las medidas de rigor presupuestario qu se han puesto en marcha.

En relación con las perspectivas de la banca con la llegada de la tercera fase de la Unión Económica y Monetaria, recalcó que la puesta en marcha del Banco Central Europeo representa que, por primera vez, la Unión Monetaria está en igualdad de condiciones con Estados Unidos en lo que a política monetaria se refiere.

El ministro de Economía destacó además la gran capacidad competitiva de la banca española en relación con otros países del entorno europeo. Puso como ejemplolas recientes reducciones en el precio de los créditos hipotecarios.