Así se expresó Sánchez en una rueda de prensa tras reunirse con los presidentes de Asturias y Cantabria, Adrián Barbón y Miguel Ángel Revilla, para presentarles el plan de su departamento para continuar con la compra de estos trenes encargados a CAF.

“Estamos aquí para encontrar soluciones”, afirmó la ministra, quien admitió que “nos hacemos responsables del retraso en la entrega de los trenes”. “Me he dejado la piel para conocer todo lo ocurrido y para solucionar esta situación”, añadió.

En cuanto a lo ocurrido, denunció que el problema ha sido que “se ha tardado demasiado tiempo en decidir la solución necesaria para comenzar su fabricación”.

A este respecto, explicó que una vez aprobada la utilización del método comparativo el diseño de los trenes podrá estar terminado este verano de manera que CAF podrá iniciar la fabricación de los trenes a inicios de 2024 para que las primeras entregas se produzcan en los primeros meses de 2026.

Además, anunció que el Gobierno va a ampliar hasta 38 el número de unidades adquiridas, frente a los 31 previstos hasta ahora. Se trata del máximo previsto en los pliegos.

Por otro lado, Transportes nombrará un comisionado que controlará la ejecución de los planes de cercanías de Asturias y Cantabria y desarrollará un proceso de acondicionamiento de los trenes actuales para que puedan prestar un mejor servicio hasta la llegada de los nuevos.

Asimismo, para compensar a los usuarios se ha comprometido a transferir a estas comunidades autónomas el dinero necesario para que puedan mantener la gratuidad de los cercanías hasta que lleguen los nuevos trenes, además de permitir el uso de los trenes convencionales para servicios de cercanías.