Esta mañana, en un desayuno con Servimedia, el ministro para las Administraciones Públicas, Joan Lerma, aseguró que quiere esa negociación porque cree "fundamental" que la reforma de la Administración no esté condicionada por un posible cambio político.

Un día depués de la ruptura con CiU, Lerma advirtió que el PP tiene "mucho que decir" en esas dos leyes y que su aprobación requiere "mayor consenso" que el de una mayoría parlamentaria que representaban PSOE-CiU.

En declaraciones a Servimedia, Mariano Rajoy explica que el PP coincide con el ministro en que que "hay una serie de asuntos que precisan del mayor respaldo posible y es bueno que no estén sujetos a vaivenes políticos, entre los que están esas dos leyes y todos los temas autonómicos y de la Administrción".

No obstante, Rajoy criticó al titular de Administraciones Públicas por anunciar a los medios de comunicación su deseo de negociar con el PP. "Es bueno", dijo Rajoy, "que esas ofertas se hagan al partido y el partido no ha recibido ninguna oferta en ese sentido".

Si la oferta se produce formalmente, el PP acudirá a la reunión, pero advertirá al ministro que "las circunstancias políticas probablemente no sean las más adecuadas para debatir este tipo de asuntos y otros muchos. En este momento la impresión y la demanda que hay es que esta legislatura termine".

Por tanto, el PP, concluyó, está dispuesto a negociar pero sin olvidar que "hay un Gobierno que ya pierde votaciones en las Cortes. Y aquí el gran debate es quién va a ser el sucesor del PSOE y qué va a pasar con los Presupuestos. El clima no es el ideal, pero nosotros en los temas autonómicos siempre hemos pactado".