Rajoy compareció en rueda de prensa en el Parador de Sigüenza (Guadalajara), una vez finalizada la reunión "ordinaria" que ha mantenido durante un día y medio con sus principales colaboradores en la dirección nacional del PP: Angel Acebes, Eduardo Zaplana, Jaime Mayor Oreja, Pío García-Escudero, Josep Piqué, Javier Arenas, Alberto Ruiz-Gallardón, Carlos Aragonés y Pedro Arriola.

El líder de los populares compareció ante la prensa minutos antes de que terminara en el Palacio de La Moncloa la entrevista entre José Luis Rodríguez Zapatero y Juan José Ibarretxe sobre el proyecto soberanista aprobado en el Parlamento vasco con tres votos de Sozialista Abertzaleak.

Rajoy emplazó al presidente del Gobierno a aceptar su oferta porque, "en un momento como el que vive España, sería una enorme irresponsabilidad que los dos grandes partidos no hicieran un acuerdo sobre lo que es el modelo de Estado". "El PP no va a caer en esa irresponsabilidad", apostilló.

El presidente del PP explicó que el pacto que entregará por escrito a Rodríguez Zapatero, que previamente será sometido a ratificación del Comité Ejecutivo Nacional en una reunión extraordinaria convocada por la mañana, afectará principalmente al modelo de Estado.

Será un ofrecimiento "muy generoso" partiendo de la base de que, según dijo, a la mayoría de los españoles les gustaría que los dos principales partidos políticos estén de acuerdo en "tres o cuatro" asuntos fundamentales.

Además, resaltó que PP y PSOE deberían coincidir en la estrategia contra el terrorismo, en el modelo territorial del Estado, en la política exterior y en el contenido del Pacto de Toledo sobre las pensiones. Si Zapatero no acepta su propuesta, advirtió de que mantendrá su oferta en pie porque es lo que quieren los ciudadanos.

Pese a que considera que sus anteriores ofertas al Gobierno han obtenido como respuesta "el desprecio", aseguró que PP y PSOE deben defender al unísono los derechos fundamentales de la Constitución dado el "grave desafío" al que se enfrenta la soberanía nacional.

RETIRAR EL "PLAN IBARRETXE"

Rajoy reiteró que la única solución que cabe en estos momentos es que el "lehendakari" retire su plan independentista "a la mayor celeridad posible". Si no lo hace, apostó por responderle con "todos los medios jurídicos" que ofrece el Estado de derecho.

"Lo que ha hecho el señor Ibarretxe es profundamente desleal porque ha incumplido el acuerdo al que llegó su partido cuando se aprobó el Estatuto de Guernica", dijo.

"Ha cometido una enorme ilegalidad, por eso pedimos que se recurra al Tribunal Constitucional, y, además, creo que pone en peligro, por lo que supone de generación de incertidumbre, de intranquilidad y de desconfianza, el propio bienestar de la sociedad vasca".

Rajoy calificó el proyecto soberanista de "ruptura radical con la Constitución" y prometió que el Partido Popular piensa combatirlo "con la mayor contundencia posible" si el propio Ibarretxe sigue negándose a retirarlo.

El presidente del PP trató de restar importancia al choque de declaraciones entre Jaime Mayor Oreja y Josep Piqué sobre las similitudes entre las reformas de los estatutos vasco y catalán.

Para ello manifestó que la posición de su partido es la que fijó en septiembre en San Millán de la Cogolla, donde acordó apoyar las reformas que respetaran la Constitución y partieran del consenso político.

Además, Rajoy aseguró que el encuentro con sus máximos colaboradores en la dirección nacional del PP ha servido para empezar a preparar la estrategia ante el referéndum sobre la Constitución Europea del 20 de febrero y analizar las diferencias en el área económica del Gobierno sobre el incremento del Salario Mínimo Interprofesional (SMI).

El líder de los populares anunció que el Partido Popular piensa solicitar la comparecencia parlamentaria de José Luis Rodríguez Zapatero para que explique lo que considera una "disputa pública" entre el vicepresidente segundo, Pedro Solbes, y el ministro de Trabajo y Asuntos Sociales, Jesús Caldera.