Para el líder popular, es preciso que el Ejecutivo "dé la batalla", como sucedió en el Consejo Europeo de Berlín de 1999, y que defienda que cada estado miembro contribuya en proporción a su PIB, evitando que España se convierta en "pagana" del proceso de ampliación.

Una actuación, ha añadido, que le valdría al respaldo del PP. "El Gobierno es el Gobierno y es el que tiene que defender los intereses generales españoles y yo lo apoyaré, si los defiende bien", señaló.

"Creo que es un momento muy importante para Europa, pero también es un momento muy importante para España y hay que conciliar la necesidad de aprobar pronto unos presupuestos con el hecho de que España no se convierta en el pagano de la ampliación. Por tanto, éste es el momento de la política, de abordar las cosas con seriedad, de defender los intereses generales de los españoles y de conseguir resultados", ha apostillado.

En declaraciones a los medios de comunicación al inicio de la Cumbre del PPE, Rajoy ha señalado que el coste de la ampliación se debe sostener sobre la base del PIB de cada país, porque el saldo neto que la propuesta británica recoge para España resulta inaceptable.