Durante un mitin en el Pabellón Príncipe Felipe, en el que se congregaron más de 6.500 personas, Rajoy se comprometió a "terminar con el bloqueo y la paralización a la que los socialistas han sometido las obras del Pacto del Agua" durante estos cuatro años de legislatura.

Rajoy, que hace dos días aseguró en Murcia y Alicante que trasvasará a estas regiones el agua que sobre en el delta del Ebro, repitió hoy la misma idea en Zaragoza pero haciendo hincapié en que, antes de cualquier trasvase, cumplirá con las obras del Pacto del Agua en Aragón.

Rajoy reivindicó en Zaragoza la necesidad de "ayudar" a los ciudadanos de otras provincias con escasez de agua porque "todos somos españoles". Lo hizo después de presumir de "convicciones firmas e ideas claras" y de criticar a Zapatero porque "un día dice una cosa y otro la contraria" cuando habla de agua.

"A mis 52 tacos me puedo permitir el lujo de decir lo que pienso en cualquier realidad de España. Otro, ése en el que estáis pensando, no", criticó en alusión directa a Zapatero.

Rajoy aseguró que la aportación de Zapatero para solucionar este problema se puede resumir "en una palabra: nada". "Lo sabe todo el mundo", añadió mientras los simpatizantes coreaban el final de cada frase al grito de "nada". "No ha hecho nada, no ha resuelto nada, no se ha dedicado a hacer nada y su programa para el futuro es nada", dijo.

A modo de contrapunto, anunció que si llega a La Moncloa concluirá el recrecimiento del embalse de Yesa y La Tranquera; terminará los embalses de Lechago y Santolea e impulsará los de Mularoya, San Salvador, y garantizará el abastecimiento de Huesca y de los valles del Jiloca, Queiles, Matarraña y el resto de las obras del Pacto del Agua.

Rajoy advirtió de que si no se hacen todas estas obras en Aragón "estamos condenados al desastre", que es donde, a su juicio, lleva a España "los que no hacen nada". Además, confió en que con estas obras "se termine esta absurda polémica y esta división que no conduce a nada".